luces que en mi corazón se pensarían.
Desnudarme como soy, siendo así como la arena,
que resbala en tu querer, por donde pueda.
Darte para retenerte, recelar si no me miras,
con tus ojos, tu boca, tu savia, que es mía, mía.
Responde a mi nombre si te lo susurran,
arranca de todo mi piel que es tan tuya,
que arda tu cuerpo si no estás conmigo amor.
Olvídame tú, que yo no puedo,
no voy a entender el amor sin ti.
Olvídame tú, que yo no puedo,
dejar de quererte,
por mucho que lo intente, no puedo...
Olvídame tú.
Qué bonito cuando el Sol derramó sobre nosotros,
esa luz que se apagó, que se perdia.
Si tú quieres quiero yo, palpitar de otra manera,
que nos lleve sin timón, lo que nos queda.
Sentiremos tal vez frío, si no existe poesía,
en tus ojos, tu boca, tu savia, que es mía, mía.
Y el tiempo nos pasa casi inadvertidos,
golpea con fuerza lo tuyo y lo mío,
que pena ignorarlo y dejarlo perdido amor.
Olvídame tú, que yo no puedo,
no voy a entender el amor sin ti.
Olvídame tú, que yo no puedo...
dejar de quererte,
por mucho que lo intente, no puedo...
Olvídame tú.
Olvídame tú, que yo no puedo,
no voy a entender el amor sin ti.
Olvídame tú, que yo no puedo,
dejar de quererte...
por mucho que lo intente, no puedo...
Olvídame tú.